En CEPA entendemos que el derecho
a la educación no solo es el derecho a acudir a una clase y a examinarnos;
tenemos derecho a recibir una formación
de calidad que sirva para desarrollar unos ciudadanos libres e iguales
entre ellos.
En la actualidad existe una
desvalorización de los contenidos que recibimos , ya que las políticas de los
últimos gobiernos han ido encaminadas a la adaptación de los contenidos a los
interese empresariales, prueba de ello son las cátedras que la universidad
concierta con empresas privadas, como por ejemplo la cátedra Boiron.
El Plan Bolonia supuso en muchas
carreras un recorte tanto de
asignaturas, como de contenidos, en beneficio de unos estudios de posgrado cuyo
precio es muy superior al del grado; lo cual fomenta una división entre
estudios de primera y de segunda categoría, además de adaptarlos a los
objetivos puramente empresariales.
A esta situación hay que sumar la
falta de presupuesto, el mal estado de los materiales y de las aulas o las
condiciones precarias de la contratación de gran parte de los profesores; lo
que provoca que la formación que recibimos sea cada vez peor.
Desde CEPA entendemos que los
estudiantes no podemos seguir tolerando esta situación, debemos organizarnos y
luchar por una educación que de verdad nos sirva para instruir hombres libres,
en la que se adquieran conocimientos científicos para mejorar la vida de la mayoría
social. Por ello te animamos a votar el próximo martes, te animamos a dar un
voto de rebeldía y de insumisión, pero también un voto que proponga otro modelo
de educación, un modelo de educación al servicio de todos y todas y no de una minoría
que se enriquece a costa del resto.